Entradas

Mostrando entradas de enero, 2018

Epitafio desafiante

Imagen
En una ocasión, en una ciudad que creo que ya ha perdido su nombre, una noche de perpetuo invierno en la que se escondían los refugios, compartiendo el calor de un fuego de calle, escuché la última voluntad de unas manos con guantes, como un cuento de los de antes. He observado muchos tipos de silencios, pero nunca se han roto como aquella vez No me merecías: Te regale letras, palabras en voz, horas de días, algunas tardes, muchas noches. Pero no me merecías, siempre respondías de prisa, compitiendo o con desgana. Se acabo. Se ha agotado mi paciencia, ya no tengo tiempo para falsos reflejos. Cuando quieras no voy a responderte ni de prisa. No me mereces. Ni siquiera ahora que ya no estoy. No me escribas, ya no tengo remite. Pero… No me olvides. Silencio hasta el alba. Aprendí la lección. Nunca olvidaré su voz. Veo un tren a lo lejos. Te encontraré rayo.